Lección nº 1 - La importancia de la exageración.
Cuando uno lee en una partitura "Forte" o "Piano" no debe pensar en "ahora tengo que tocar más fuerte o más suave" si no, en que el sonido que sale de nuestro piano realmente suene fuerte o suene mas suave.
Es una diferencia de términos pareciera, pero muchas veces nos damos cuenta que en zonas que aparecen matices específicos nos olvidamos que no solo es una cuestion de carácter que uno adapta en esa zona si no tambien una cierta Sonoridad que debe darle al piano. Digo ésto porque un error común que sucede en principiantes es que toquen todo "sin matices", ó, al menos que hagan que la música saliendo de sus pianos suene toda igual, sin matices o relieves en su discurso.
En este punto es cuando quiero destacar la importancia de la exageración.
La música como muchas otras artes se piensa: una interpretación es dada a la obra que vamos a tocar, por eso somos intérpretes, un entendimiento de todos los materiales que ofrece la partitura ha sido llevado a cabo por nosotros previamente y ahora es tiempo de mostrarlos según como los hemos entendido. Pero si entonces cualquier persona puede leer en una partitura que dice "Forte" ¿porque algunos pianistas no pareciera que tocaran fuerte en ese punto?. Porque les falta la exageración, no basta con pensar "voy a hacer un pianissimo" y tratar de tocar suave con los dedos, o mostrar que están aporreando el piano con toda su energia moviendo las manos para todos lados pero aún así no suene fuerte. El hecho es que muchas veces hacemos o creemos hacer pero en realidad no escuchamos, no escuchamos si realmente está sonando fuerte o está sonando suave. Un buen profesor con el que tomé un curso me dijo una frase que quiero compartirles: "Cuando uno exagera las cosas es cuando el público recién empieza a notar un cambio en el discurso". Muchas veces pensamos para adentro "estoy tocando muy fuerte!" y en realidad la gente que está escuchando recién empezó a notar que estás tocando mas fuerte que antes, lo mismo con cualquier elemento, como crescendos, rallentandos, acentos, accelerandos, etc. Cuando a uno le parece algo en exceso, o piensa " me pasé de lo necesario" ahi es cuando está bien, ahi es cuando por fin el público reconoce " ah, pero mira que lindo como toca suave", ó, "que potencia, como llena la sala con su sonido".
Por eso, hay que exagerar, principalmente porque da contraste a la música, así como un pintor utiliza colores diferentes y muy distintos para expresar distintas emociones nosotros tambien debemos elegir un sonido distinto para expresar distintas emociones.
La próxima vez que veas un pasaje y diga "piano", ponte a escuchar si realmente estás haciendo que tu piano suene suave, o si aparece rallentando fijate que el sonido realmente comience a progresivamente ser mas lento y no solamente pensar como mover tus dedos mas lento entre cada nota.
Es un proceso doble: pensar el sonido que queremos escuchar, y escuchar si el sonido que suena es realmente el que queriamos que suene inicialmente.
Si empiezas a aplicar este concepto de exagerar cada recurso que te ofrece la partitura tus interpretaciones pronto empezarán a cambiar para bien, empezarás a notar que nunca podría aburrirse nadie porque la música ahora cambia constantemente, y lo más importante lo nota el público y no solo tú.
Eso fue todo y espero que les haya gustado!, proximamente pondré mas lecciones cómo esta sobre interpretación, sobre teoría, tambien sobre otros géneros!
Saludos!
Paker