jueves, 5 de enero de 2012
"Un silencio vale más que mil notas"
Ahh.. que lindo es ese momento del concierto en que el pianista detiene el sonido y todos quedamos en silencio absoluto esperando la nota siguiente. Se crea una conección entre todos los oyentes y el pianista. Es un suspenso muy agradable que los buenos pianistas utilizan en su repertorio.
Sucede este clima por el gran contraste que el silencio ofrece en la interpretación.
- Es un principio simple, si escribo todo en negro será siempre lo mismo, si escribo algo en rojo quizás le prestes otra atención.
¿Cómo podemos y debemos utilizar este recurso?
Lo principal es reconocer principios y finales de frases, muchas veces una modulación de la armonía, o un cambio de tiempo dictan cuando puede hacerse un silencio, un vacío que indique que algo terminó y algo está por empezar. Un silencio no significa el agregar un silencio escrito y nada más, implica una respiración por parte del intérprete, una toma de energías para decir algo nuevo.
Éste recurso es muy pero muy impactante cuando se da la oportunidad de hacerlo luego de un gran ritenuto o rallentando yendo hacia un pianissimo, el efecto que se produce al ir apagando el sonido lentamente y llegar al silencio absoluto es una de las cosas más bellas de oír.
Sin silencios no habría contrastes, aprovechemos que están allí y demosle la presencia que merecen.
"Dale sonido a tus silencios"
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